El viernes llegué a Lekeitio, y no pude resistirme, a acudir al pedrero después de casi tres meses. Cuando apenas llevaba media hora pescando, aparecieron Alberto y dos amigos suyos, y nada de nada. Estuvimos en ese sitio mas o menos hasta las seis, cuando decidí cambiar de escenario. O sea, que coger la bici, y llegué a una empinada bajada, que por la lluvia caída por la noche, resbalaba de una manera impresionante. Terminé de bajar, pero la mar estaba demasiado en calma, como para poder pensar que alguna caería, pero había que intentarlo. Al de unos veinte minutos, siento un pequeño tirón a un raglou de 16cm, cuando me disponía a levantar el señuelo del agua, una loba que difícilmente llegaría a un kilito, ataca sin exito. Desde luego, si no es por x es por y, pero la jornada finalizó sin ninguna captura.
Desgraciadamente, el fin de semana continuó de la misma manera, con mar plato, y con cero capturas, bueno, habrá que seguir intentandolo.
Unas fotitos:
No pasa nada tio, ya vendran dia mejores. Nosotros el Sabado por hay lo mismo.
ResponderEliminarSaludos
Jo, la mar parecía un plato de sopa, este finde moverá algo más.
ResponderEliminara ver, a ver...
ya saldran ,ademas esa zona de la ultima foto tiene muy buena pinta, seguro que alguna sorpresa te dara.
ResponderEliminarUn Saludo
dios te oiga menen, algún ataque ya se produce por ahí..., pero ninguna buena.
ResponderEliminara ver, a ver si me da una buena sorpresa
un saludo!!!